Están escondidos en canoas, palos de golf y de hockey, en motos de carreras, cascos de yates e incluso en trajes de baño: los compuestos de fibra hicieron incursiones en la industria del deporte hace mucho tiempo y prácticamente lo han revolucionado en algunas áreas. Del 6 al 8 de noviembre de 2018, Composites Europe demostrará en Stuttgart (Alemania) por qué los deportistas de verano y de invierno pueden confiar firmemente en los composites, también cuando se trata de ofrecer mejores actuaciones deportivas en el futuro.
Los beneficios que los composites aportan al sector deportivo y de ocio son amplios y variados. Estos materiales destacan por su poco peso, alta resiliencia, rigidez a la flexión, elasticidad, conformabilidad casi total, resistencia a la corrosión y otras condiciones climáticas, así como capacidad de absorber y transmitir grandes cantidades de energía.
En Composites Europe, varios expositores mostrarán aplicaciones para composites, así como tecnologías y aplicaciones asociadas en las industrias de deportes y ocio.
Los deportes de competición, como motor de desarrollo
El CFP, en particular, se ha usado en los deportes durante décadas. La mayoría de las veces, los deportes de competición y/o profesionales han impulsado desarrollos, ya que se trata de obtener esos milisegundos o milímetros claves para lograr ventaja. Con la ayuda de mejores materiales, se mejoran las estructuras. Y también están disponibles los fondos necesarios gracias a poderosos patrocinadores.
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