IK4-IDEKO inicia su tercera década de actividad con nuevo liderazgo

Nerea Aranguren es Ingeniero Industrial por TECNUN y Doctora en Innovación Estratégica por Mondragón Unibersitatea, y ha desarrollado su trayectoria profesional en IDEKO, comenzando en 1998. Ocupó el cargo de directora del departamento de Ingeniería de Producto entre 2003-2009, pasando a ser directora de Innovación y Explotación Tecnológico de IDEKO entre 2009 y 2016. A finales del pasado año paso a ocupar el cargo de Directora Gerente de la organización. En la entrevista Nerea hace un recorrido por los principales hitos de su trayectoria y la del Centro Tecnológico que ahora lidera y apunta los principales retos que deberán abordar.

“Llevo toda mi vida trabajando en IDEKO – rememora Nerea Aranguren, la nueva líder del Centro Tecnológico -. Entré hace 18 años con una beca y mi trayectoria ha estado muy centrada en los ámbitos de I+D y fabricación, con una progresión que me ha hecho lidiar con las distintas actividades que se pueden llevar a cabo en un centro de investigación, pero siempre cercana al ámbito de empresa, en los entornos del marketing, la transferencia de conocimientos y la relación con las empresas. La tesis doctoral la realicé en modelos de colaboración entre organismos de investigación y empresas”.
La lectura la realizó el 5 de noviembre de 2012 y bajo el título “Diseño y Desarrollo de un Modelo de Colaboración entre Centros Tecnológicos y Empresas para la Gestión de la Innovación Tecnológica y la Transferencia de Tecnología” y ya entonces proponía un modelo de colaboración soportado en tres niveles de gestión: estratégico, táctico y operativo, y enfocado a asegurar la orientación a resultados y un óptimo aprovechamiento de los recursos dedicados a la Innovación. Para ello contemplaba el tratamiento de las variables identificadas como clave en el establecimiento de relaciones colaborativas entre la empresa y el centro tecnológico. Sin duda, una elección que marcó su trayectoria y ha resultado ser premonitoria.
“Efectivamente, todo ello me ha dado un bagaje para conocer de primera mano lo que necesitaban las empresas y lo que entienden que es este ámbito de la I+D. En este entorno creo que IK4-IDEKO ha realizado, en los últimos ocho años sobre todo, una fuerte apuesta por la especialización, por mejorar el nivel científico de nuestra plantilla, de nuestros proyectos y de nuestro plan de investigación lo cual ha sido muy positivo porque nos ha permitido dar un gran salto y obtener unos resultados que nos han posicionado adecuadamente para conseguir nuestro reconocimiento actual. Ahora lo que nos toca, ante una demanda industrial que está ávida de aplicar temas como la Industria 4.0, la diferenciación tecnológica…, es seguir manteniendo el enfoque en la empresa. Con un foco muy potente en la transferencia y en la industrialización de resultados sin dejar de lado lo que ya hemos conseguido en el campo de la investigación. Porque en Investigación hemos alcanzado la mayoría de edad, y tenemos que mantener esa posición”.

30 años de historia
Aunque en este artículo se recogen en otro apartado en forma de breves pinceladas los principales hitos y logros en los 30 años de historia de IK4-IDEKO, Nerea, testigo activo en ese devenir hace también su resumen más personal. “Una primera etapa fue la fundación de IDEKO y su consolidación como organización. En esos primeros años creamos una unidad de I+D empresarial. Fue en la segunda etapa, más potente en desarrollo tecnológico, cuando nos empezamos a introducir en los primeros proyectos europeos, e iniciamos la introducción de Doctores en nuestra plantilla. Fuimos creciendo de unidad de I+D a centro tecnológico.
En esta segunda etapa fuimos muy activos asentando las bases para nuestro futuro, nos certificamos en sistemas de calidad, empezamos a introducir sistemas de gestión interna, comenzamos con el Modelo EFQM y lanzamos las líneas de investigación. Y ha sido en la última etapa, estos últimos diez años, cuando ya nos creímos que éramos un centro tecnológico de verdad, y obtuvimos la mayoría de edad como centro.
Evidentemente, en esta etapa la plantilla también ha madurado en conocimiento y edad, tenemos más experiencia y eso se nota mucho en que las iniciativas y los proyectos salen de forma más ágil. Al principio éramos unos jóvenes tratando de hacernos un hueco en un mundo del que desconocíamos muchas cosas y asistíamos a reuniones con otros centros tecnológicos, como los alemanes, con cierto complejo de inferioridad. Ahora estamos muy especializados en ciertos temas y en estas áreas nos movemos sin ningún complejo. En estos últimos diez años sobre todo nos hemos especializado, hemos desarrollado mucho la parte científica y académica y hemos obtenido una mayoría de edad como centro tecnológico que nadie se cuestiona, con el reconocimiento de otros centros tecnológicos y de las empresas. Creo que esta especialización ha sido fundamental, es muy importante porque, por un lado, nos enfrentamos a un entorno muy complejo donde se barajan gran cantidad de temas diferentes, que van cambiando con gran rapidez en un mundo global, y, por otro, la comunicación hoy es inmediata y se nos exige también respuestas en el mismo sentido: rápidas, inmediatas. En este panorama es fundamental la especialización y para nosotros ha sido un factor diferencial, hoy por hoy creo que el que no se especialice lo va a tener difícil para sobrevivir, hay que ser muy bueno en las áreas que escojas, ya que si pretendes trabajar en todos los ámbitos es imposible avanzar. Como versa el refrán: el que mucho abarca poco aprieta”.
Y para la nueva directora gerente de IK4-IDEKO la especialización será también una de las claves de desarrollo para los próximos años. “Nosotros siempre nos hemos especializado en máquina-herramienta y en fabricación pero aun así tenemos que seguir siendo todavía más exquisitos en esta especialización apuntando a temáticas muy concretas donde podamos seguir diferenciándonos. Y especializarse exige elegir entre variables y para elegir hay que descartar temas y esto no es fácil. Esa elección es complicada, muchas veces supone una apuesta y toda apuesta significa arriesgar. Por ello, otro eje que considero será fundamental en los próximos cuatro años es la colaboración, el establecimiento de alianzas y colaboraciones estables que permitan nuestro desarrollo. Si queremos introducirnos en una temática nueva dentro de las tecnologías de fabricación, para no partir de cero, vamos a intentar colaborar con el mejor, con el líder y sobre ese conocimiento apalancarnos para aportar nuestra experiencia de 30 años y nuestro conocimiento del sector. Para eso estamos estudiando fórmulas de diversos tipos, tanto con agentes de investigación con quienes ya hemos tenido estancias cruzadas de investigadores en universidades y centros extranjeros, como a través del apoyo de referentes especializados en ciertos ámbitos concretos, estableciendo proyectos de colaboración. Para ello, tenemos que ser más críticos y selectivos a la hora de elegir a qué nos dedicamos porque realmente los centros tecnológicos podemos hacer casi todo al contar con personas brillantes, con muchas capacidades. Esto es básico para avanzar en las colaboraciones porque aunque se dividan las áreas de trabajo siempre quedan áreas de roce donde hay que decidir que partes hace uno en vez de otro. Esa colaboración no es sencilla pero cuando se consigue que funcione bien el resultado suele ser muy llamativo. Por ello vamos a trabajar para avanzar en colaboraciones desde la base de la especialización”.