Es el caso de los plásticos, para cuya soldadura existen tecnologías láser muy probadas y a través de equipos accesibles para la gran mayoría de las empresas industriales. La gran ventaja de este sistema es que lleva a cabo un proceso de unión totalmente limpio y que mantiene las características de los componentes que se van a soldar. Tales propiedades son muy útiles para sectores que necesitan soldar componentes muy sensibles como la industria del automóvil, electrónica, medicina, envase y embalaje y productos de consumo humano.
Más ventajas
Además de estos dos beneficios, el uso de la soldadura laser presenta otras ventajas que os resumimos a continuación:
- No ejerce esfuerzos mecánicos sobre la pieza.
- La incidencia térmica es mínima.
- No genera partículas, ya que se produce una unión interna.
- No es necesario añadir componentes externos a la unión.
- La soldadura es estanca, y presenta alta resistencia y durabilidad.
- Se trata de un proceso estable y flexible, que tenemos la posibilidad de controlar.
Si comparamos la soldadura láser con algunas de las técnicas tradicionales de unión, vemos que éstas presentan algunos problemas que con el láser desaparecen. Por ejemplo, cuando se une mediante adhesivos, es necesario realizar una preparación previa de las superficies y utilizar disolventes. La soldadura por calor o aire calientees más económica, pero a la vez requiere un proceso lento y que causa desgaste en las piezas. Como la zona calentada es superior al área de soldadura,no puede utilizarse con componentes sensibles. Por su parte, sistemas como los ultrasonidos, la fricción o la vibración someten a las piezas a grandes esfuerzos mecánicos, lo que obliga a desarrollar construcciones más complejas y a revisar las máquinas con regularidad.
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