La industria norteamericana del plástico, liderada por EEUU, está obteniendo este año buenos resultados comerciales. Los indicadores de ventas, ingresos y crecimiento apuntan hacia arriba en un futuro previsible. Entre los factores que impulsan el crecimiento, se encuentran la revolución digital en los controles y la comunicación de las máquinas, que trae consigo avances significativos en las capacidades de automatización y procesos, así como beneficios en la productividad, la economía de fabricación y la calidad; los mercados nuevos y en evolución que generan demanda para las aplicaciones de plásticos, y un ambiente favorable a los negocios en EEUU. Bajo la presidencia de Donald Trump, este ambiente se caracteriza por la reducción de los impuestos federales, el aumento de los gastos del gobierno y la relajación de muchas reglamentaciones onerosas desde 2017.
100 empresas estadounidenses y 18 canadienses estarán representadas en la feria K 2019. Alrededor de 8.500 visitantes profesionales norteamericanos se dieron cita en Düsseldorf (Alemania) la pasada edición para participar en la feria líder mundial del sector de plásticos y cauchos.
Optimismo económico contenido
Los analistas informan que el producto interior bruto (PIB) de EEUU registró un aumento del 3% en 2018 frente a 2017 y que debería aumentar de un 2% a 3% en 2019. Este aumento representa un crecimiento saludable, pero no se considera lo suficientemente alto como para desencadenar inflación, tasas de interés prohibitivas o una “exuberancia irracional” entre los inversores, prestamistas y consumidores, que podría conducir a una contracción económica.
Para poder ver el contenido completo tienes que estar suscrito. El contenido completo para suscriptores incluye informes y artículos en profundidad