Los trabajadores cada vez muestran más interés por la sostenibilidad en el trabajo

El 18 de septiembre, Naciones Unidas reunió en Nueva York (EEUU) a un centenar de líderes mundiales para presentar los avances y propuestas para la segunda mitad de la Agenda 2030. El secretario general de la ONU, António Guterres, señaló que todavía queda mucho camino por recorrer en la consecución de las metas fijadas en 2015, y es que solo un 15% de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) están en vías de cumplirse.
Uno de los marcos clave para la consecución de los ODS y lograr objetivos como la producción y el consumo responsable, la innovación en la industria o la lucha contra el cambio climático es, sin lugar a dudas, el ámbito empresarial. Las compañías tienen la capacidad de utilizar su influencia y recursos para generar un impacto positivo tanto en la sociedad como en el medio ambiente. En este contexto, InfoJobs, la plataforma de empleo líder en España, publica la primera edición de su “Informe sobre sostenibilidad en el trabajo”, cuya principal conclusión es que el37% de la población activa le da mucha importancia a la existencia de protocolos relacionados con la sostenibilidad en el trabajo.
Sorprende, sin embargo, que la percepción de los trabajadores es que se preocupan más por la sostenibilidad de lo que lo hace su empresa. En este sentido, si se hace una comparativa entre la relevancia de la población ocupada frente a la que perciben sobre sus compañías, se observa que elporcentaje de “mucha relevancia” es del 36% para el empleado y del 28% para la empresa en la que trabaja,el de “poca relevancia” aumenta 5 puntos porcentuales (del 16% al 21%), y la media total baja de un 6,5% de importancia para el trabajador al 5,9% para la compañía.

Las mujeres, más “preocupadas” que los hombres
El desglose entre ocupados y desocupados muestra cómo la relevancia es mayor entre aquellos que no se encuentran trabajando (43%), frente a aquellos que sí (36% de las menciones). Así, la población que actualmente trabaja le concede menor importancia a la existencia de protocolos relacionados con la sostenibilidad.