La reticencia de Alemania a apoyar la propuesta de la Comisión Europea de inyectar 100.000 millones de euros adicionales en el presupuesto septenal de la UE hace temer por el futuro de la financiación de la investigación, según se alerta en el nuevo número de “Innobasque Tendencias”, la sección mensual con la que la Agencia Vasca de la Innovación analiza las corrientes tecnológicas, científicas y sociales que marcarán el futuro de la innovación en Euskadi.
El suplemento propuesto incluye 10.000 millones de euros para la Plataforma de Tecnologías Estratégicas para Europa (STEP), un programa tecnológico estratégico. Sin embargo, Alemania, uno de los principales contribuyentes al presupuesto de la UE, parece centrada en destinar fondos al apoyo a Ucrania y es posible que no apruebe financiación adicional para STEP u otras iniciativas.
Esta situación arroja dudas sobre el futuro de la financiación de la investigación y la innovación, según se advierte en la publicación. A pesar de los llamamientos de los investigadores y el Parlamento Europeo para que se incremente el gasto en investigación, algunos Estados miembros están presionando para que se reduzca.
La duda que se plantea
La cuestión que se plantea es si las limitaciones presupuestarias y las reticencias de los Estados miembros obstaculizarán la capacidad de la UE para invertir significativamente en investigación e innovación, sobre todo durante las transiciones cruciales hacia iniciativas ecológicas y digitales.