El eslogan de Redtenbacher “Alles rund um die Brille” (“Todo sobre las gafas”) resume el negocio principal de la empresa. Esta compañía multinacional fabrica piezas particulares, principalmente para la industria de las gafas. Redtenbacher se basa en un alto nivel de integración vertical, con un impresionante nivel de precisión y soluciones pioneras de automatización. Stäubli es clave en el proceso.
Para la fabricación de bisagras personalizadas de gafas, fue necesario emparejar una de las máquinas indexadoras rotativas con un robot capaz de cargar piezas en el sistema. El requerimiento básico para ello era identificar un robot que tuviera la capacidad de manejar piezas de precisión en un entorno de trabajo hostil. Cualquier robot que opera dentro de las células de mecanizado inevitablemente es salpicado con aceite refrigerante, lo que provocaría pronto la descomposición de un robot convencional de 6 ejes. Actualmente, los robots suministrados por Stäubli se consideran líderes del mercado para tales aplicaciones.
Los robots Stäubli han sido diseñados para seguir trabajando según las especificaciones, incluso en las condiciones más adversas. Todos los cables y líneas de comunicación se enrutan dentro del brazo robótico compacto y completamente cerrado. Para una protección óptima, todos los conectores se encuentran bajo el pedestal del robot. Además, Stäubli incorpora su propia tecnología de accionamiento patentada fabricada de manera interna. Las ventajas son: dinámica máxima, bajo mantenimiento y vida útil superior a la media. Redtenbacher había encontrado el robot adecuado para esta exigente tarea.
Solución: un robot compacto, de alta precisión y de alto rendimiento
Debido al espacio limitado disponible en la máquina indexadora rotativa, Redtenbacher optó por el robot TX40, de 6 ejes y con un rango de 515 mm. Las dimensiones compactas reducen la demanda de espacio al mínimo. La posibilidad de montaje en el techo implicaba que el robot podía integrarse fácilmente en la célula de producción. Su área de trabajo esférica también permite una utilización óptima del espacio de trabajo.
La tarea específica asignada a la máquina de 6 ejes es la carga de las piezas que se fabricarán en la primera de las 16 estaciones de procesamiento. La demanda de un tiempo de ciclo de 4,2 segundos y una precisión de posicionamiento de 0,03 mm no representaron ningún problema para el robot. Una vez cargada, la pieza se fabrica en un ciclo rotativo que abarca todas las unidades de mecanizado individuales.
Uso del cliente: seguridad y flexibilidad
Cuando hubo que integrar el robot, el alto nivel de transparencia del controlador del robot y de sus diversas interfaces fue extremadamente beneficioso. El equipo de Redtenbacher también quedó impresionado por el apoyo brindado por Stäubli en la integración del robot en la unidad de control de la máquina, así como en la programación y la puesta en servicio.
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