inject 4.0, soluciones para la smart factory de Engel

Desde siempre, el principal objetivo de Engel ha sido aumentar continuamente el beneficio de sus clientes. Tanto si se busca la integración total de los periféricos, como si se quieren diseñar conceptos de automatización a medida o introducir la generación de controles CC300, para esta empresa representada en España por Helmut Roegele lo principal es el desarrollo de la célula de producción óptima. Para continuar ese desarrollo, ante un futuro que depara desafíos cada vez más complejos, las soluciones deben seguir siendo sencillas. Partiendo de esa idea, Engel lanzó inject 4.0 y se ofrece a guiar a los clientes en su camino hacia una producción con máquinas de moldeo por inyección interconectadas capaces de optimizarse a sí mismas.

Hace tres años, Engel -representada en España por Helmut Roegele- presentó su respuesta a los desafíos de la industria 4.0: inject 4.0. Los términos smart machine, smart production y smart service se han consolidado en el conjunto de la industria del plástico y, en sectores amplios, la smart factory ya es una realidad. “Ahora ha llegado el momento de dar el siguiente paso”, anunció Stefan Engleder, director ejecutivo del grupo Engel, en el foro Engel inject 4.0 a finales de junio en Linz (Austria). Los mercados interconectarán las empresas a lo largo de la cadena de valor y generarán nuevos productos y servicios para la industria del moldeo por inyección. “La transformación digital lleva inject 4.0 a una nueva dimensión”, aseguró Stefan Engleder.
La digitalización no es un fin en sí mismo; esto se puso de manifiesto una vez más en el evento al que Engel invitó a un círculo selecto de usuarios de inject 4.0 impulsados por la innovación. El objetivo de la industria 4.0 es aprovechar al máximo el potencial de las máquinas, las células de fabricación y las tecnologías para reforzar la competitividad, reaccionar con mayor flexibilidad y dominar la creciente complejidad con seguridad. La transparencia y la asistencia basada en ella son clave para incrementar la eficiencia. “Hemos avanzado mucho en esta dirección”, afirmó Stefan Engleder. “Sin embargo, desde el principio tuvimos claro que con la industria 4.0 emprendíamos un largo viaje. El objetivo es conocido; para alcanzarlo, debemos desarrollar el camino de forma continua, etapa a etapa, junto con nuestros clientes y socios. Actualmente nos encontramos ante el siguiente gran paso”.

Objetivo: integración horizontal
Hasta ahora, el camino hacia la smart factory se centra sobre todo en la optimización funcional de las distintas etapas de la cadena de valor, como la producción o la distribución, así como ámbitos que no añaden valor directamente, como la gestión del mantenimiento y el control de calidad dentro de una empresa. Para ello, se recaban y se analizan datos de las máquinas y de los procesos, y la planta de producción se integra verticalmente con el nivel de la gerencia sobre la base de imágenes digitales de las máquinas y las células de fabricación. Estas plataformas clásicas de IIoT (Industrial Internet of Things) suelen ser soluciones privadas. Sin embargo, en la práctica, las estructuras de plataformas verticales no satisfacen las necesidades de procesar datos de sistemas de proveedores diferentes y correlacionarlos con los datos de otras empresas.
Por esta razón, la transformación digital tiene el objetivo de pasar a plataformas horizontales que agrupen los conocimientos y la oferta de diferentes empresas. Una integración horizontal abierta permite optimizar procesos a lo largo de toda la cadena de valor de manera multifuncional. “La transformación digital acaba de empezar. Esto constituye una gran oportunidad. Invitamos a nuestros clientes y socios a continuar conformando activamente el futuro de la producción inteligente con nosotros y adaptar las nuevas soluciones a los requisitos específicos de la industria del plástico”, destacó Stefan Engleder. “Así todos nos beneficiaremos al máximo de las nuevas oportunidades que se presentan”.

Un mercado para toda la cadena de valor
Los mercados B2C como Amazon o Google son el modelo a seguir. En lugar de los activos físicos y las actividades de valor añadido asociadas, estas empresas apuestan por la relación entre la oferta y la demanda e interconectan los operadores del mercado con ayuda de las tecnologías digitales. Las plataformas recopilan una gran cantidad de datos para generar nuevos servicios. La capacidad de tratamiento y análisis de datos es la base para poder atender a las necesidades de los clientes aún mejor y de manera más específica.
Esta tendencia llega al segmento B2B, donde el término “mercado” también se consolida. En el futuro, los operadores del mercado interactuarán con flujos de valor idénticos, similares y complementarios en mercados, ofrecerán sus productos y tecnologías allí e incluirán tanto a sus proveedores como a sus clientes en esta red. El procesador de plásticos, que emplea un gran número de sistemas de proveedores distintos, puede encontrar toda la información relevante de forma centralizada y utilizar las aplicaciones ofertadas de forma muy eficiente. “La integración horizontal sienta las bases para nuevos modelos empresariales, que pueden complementar los que ya tenemos y ofrecer valor añadido a nuestros clientes”, declara Stefan Engleder.
Adamos, por ejemplo, ofrece un mercado de este tipo específico para la industria. Se trata de una plataforma abierta e independiente de cualquier fabricante que ha sido desarrollada específicamente para cubrir las necesidades de la construcción de máquinas y sus clientes, y en la que Engel también participa.

Contribución a la smart factory
inject 4.0 combina las ventajas de smart machine, smart production y smart service, ofreciendo una base sólida para la producción inteligente. Gracias a la integración horizontal y vertical de los datos, cada uno de los módulos de inject 4.0 puede contribuir a mejorar la smart factory.
Con la integración de datos horizontal, se garantiza el intercambio fluido de datos y la disponibilidad de información relevante a lo largo de toda la cadena de valor añadido. El concepto Plug & Produce permite contar con sistemas de producción en los que el cliente podrá integrar con más facilidad otras instalaciones Engel o dispositivos periféricos. Gracias a ello, disfrutará de la máxima flexibilidad.
La integración vertical, por su parte, permite a los sensores individuales, a los periféricos de cualquier tipo y a la propia máquina establecer una comunicación integral con los diversos sistemas: desde el MES hasta el ERP. El resultado es una transparencia absoluta a lo largo de todo el proceso de producción y una base de datos en la que poder basar los análisis y las decisiones.