La tendencia al ahorro de peso en el sector de la automoción no solo sigue intacta, sino que adquiere cada vez más importancia a medida que se acerca el año 2020, cuando las emisiones de flota de CO2 de los fabricantes automovilísticos europeos deberán cumplir con requisitos mucho más exigentes. La contribución de los materiales termoplásticos, con refuerzo de fibra corta y larga, al peso ligero en la actualidad es importante, ya que gracias a ellos se han podido sustituir innumerables componentes de fabricación metálica, por equivalentes de plástico de igual capacidad. Con el tiempo, estos componentes y materiales de plástico están empezando a alcanzar sus límites fundamentales. El próximo gran avance en la sustitución de metal en la construcción de vehículos solamente tendrá éxito si va acompañado de un salto tecnológico, utilizando refuerzos de fibra continua en las estructuras de moldeo por inyección, como por ejemplo los materiales composites termoplásticos. Una vez establecidos, los composites termoplásticos y termoestables pasarán a representar un volumen de mercado cercano a 2.000 millones de euros a largo plazo.
Nueva línea de productos semiacabados laminados y en cinta
Por esta razón, Basf está ampliando ahora sus actividades en el campo de los plásticos técnicos, para incluir un planteamiento completamente nuevo que se llama Ultracom. Se trata de un paquete de tres componentes: productos semiacabados reforzados con fibra continua, compuestos adaptados para sobremoldeo y soporte de ingeniería complementario. Las innovaciones clave en este nuevo planteamiento son los materiales laminados con base de tejidos y cintas unidireccionales (UD) que están completamente impregnadas con Ultramid o Ultradur, los materiales de poliamida y PBT de Basf. Estos composites termoplásticos se han mejorado mediante una cooperación conjunta con TenCate, fabricante internacional de composites reforzados con fibra, y Owens Corning, proveedor internacional de fibras de vidrio.
El segundo componente del paquete Ultracom son los materiales para sobremoldeo, que se han desarrollado específicamente para utilizarse con los materiales laminados. Estos materiales también proceden de las líneas de producto Ultramid y Ultradur, esta vez en forma de materiales compuestos. Gracias a la combinación de materiales laminados y cintas, se pueden producir piezas complejas por inyección, con refuerzos mecánicos muy altos en localizaciones muy definidas y precisas, mediante la utilización de fibras continuas, y que a la vez integran varias funciones específicas como resultado del sobremoldeo.
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