En su serie “Let's talk about Chemical Recycling”, la división de maquinaria de plástico y caucho de la asociación alemana VDMA charla con diferentes expertos del sector. En la última edición, ha entrevistado a Matthias Scheibitz, head of Sustainability Strategy Performance Materials de Basf, que afirma que “tenemos que dar un salto de fe”.
“Echando un vistazo a los flujos de volumen de los residuos plásticos en Europa, el Centro Conjunto de Investigación de la UE concluye que, en un escenario optimista, el reciclaje químico puede aumentar su porcentaje de reciclaje hasta en un 15% para 2030. En consecuencia, la proporción de reciclaje mecánico podría crecer hasta el 45%. El reciclaje mecánico seguiría suponiendo tres veces el volumen del reciclaje químico. Esto está completamente en línea con lo que buscamos en Basf, porque todo lo que puede reciclarse mecánicamente debe reciclarse mecánicamente. En Europa, actualmente el 23% de los residuos plásticos terminan en vertederos, el 42% se usa para producir energía y alrededor del 35% se recicla mecánicamente. Desde nuestro punto de vista, el objetivo debe ser reciclar más plásticos, incinerar menos y depositar menos en los vertederos. Creemos que habrá más mejoras en los procesos de reciclaje, no solo en procesos químicos, sino también en mecánicos. El resultado óptimo se puede lograr claramente a partir de una combinación de ambos”.
Reconocimiento del balance de masas
Cuestionado sobre por qué los recicladores de productos químicos deben luchar tanto por el reconocimiento del balance de masas, Matthias Scheibitz explica que “los nuevos procesos de reciclaje químico no existen desde hace tanto tiempo; los procesos mecánicos ya están implantados. Ya se están obteniendo miles de millones en reciclaje mecánico. Los políticos lo ven de esta manera: algo ya existe en un área, mientras que, en otra, se promete algo más, pero no es visible en la misma medida. Tenemos que dar un salto de fe”.